Colección: Riesgo y Sociedad
Serie: Protección social frente a nuevos riesgos sociales
Mecanismos universales de acceso a la salud con énfasis en situaciones de emergencia y desastres
Sandra Elizondo Argueta
Los sistemas de salud tienen el reto del acceso y cobertura universal de la población a través de servicios integrales, oportunos, eficientes y de calidad; para lo cual, se requiere implementar políticas, cambios en la legislación y estrategias organizacionales, multisectoriales que aborden los determinantes sociales de la salud y el bienestar con el fin de no vulnerar los derechos de las personas. Además, dichas políticas y estrategias deben ser realizables, medibles y efectivas. En adición a estos esfuerzos, es fundamental considerar los factores externos medioambientales que pueden mermar los avances en su cumplimiento, ya que, si no son considerados, podrían tener consecuencias graves a corto, mediano y largo plazo. Los desastres son el más claro ejemplo de condiciones negativas que afectan el acceso y cobertura universal; sus consecuencias, directas e indirectas, se encuentra la pérdida de vidas, pérdidas económicas, afectaciones sociales, políticas y culturales; y, sobre todo, implica limitaciones al desarrollo y al bienestar de la población.
El objetivo del fascículo es plantear los principales factores que ayudan a entender la relación entre los sistemas de salud y el acceso efectivo a esos servicios en situaciones de emergencias y desastres. Para ello, se argumenta que los desastres, más que eventos fortuitos, son construcciones sociales. En el fascículo, se introducen los términos de gestión del riesgo, emergencias y desastres, y se explica cómo todas las personas somos susceptibles a sus consecuencias negativas. Además, se plantean los múltiples factores -internos y externos a las personas y a las comunidades- que son determinantes para entenderlos resultados ante una emergencia. Entre estos factores, está el nivel de universalidad en el acceso a la salud; los tipos de establecimientos de salud que ofrecen atención médica en el momento de la emergencia; la capacidad de asumir los costos de los servicios de rehabilitación; así como el apoyo en la vuelta a la normalidad de las comunidades.